Cuando sea mayor, me pido tener una casa de campo!!!!
La casa tiene que ser como ésta, jejeje. Una vivienda rústica de espacios amplios, paredes de ladrillo recuperadas y pintadas en  tonos blancos, suelos de madera o cemento pulido, mobiliario y objetos antiguos recuperados, amplios ventanales para que pase la luz y podamos aprovechar la luz del día, textiles naturales en cortinas, ropa de cama y, sobre todo, muchas muchas alfombras; todas ellas  tienen que ser muy coloridas y traídas desde lo más profundo de Marruecos.
La nota predominante la pondrá la gama de colores escogida: tonos amarillo, fucsias y rojos, y lo que yo considero más importante para que sea nuestro hogar: cojines por todos los rincones.
Me ancanta la sencillez y el colorido de esta vivienda.

Vía: Cote Maison