Nos trasladamos hasta Oualidia, una pequeña población costera situada entre El jadida Y Safi. Dedicada tradicionalmente a la pesca artesanal, aunque cada vez gana más importancia como destino turístico gracias a su entorno natural. Un enclave privilegiado en el que además podemos alojarnos en un riad…
¿Qué más podemos pedir?
El riad, lejos de ostentaciones, intenta ser una vivienda sencilla y tradicional, en la que se mezclan objetos naturales (mobiliario en maderas y rafias) con otros elementos reciclados, como los cojines (hechos con sacos de harina) que lucen en el salón.
Una cocina, dispuesta con todo lo necesario para sentarnos a comer. He de decir que; tengo especial debilidad por las bandejas talladas, y me parece una idea genial lucirlas en las paredes.
Lo que más ha llamado mi atención ha sido el dormitorio infantil tan acorde al resto de la vivienda, las tres camas idénticas y sobre ellas, una luminaria colgante. Perfecta!!!

¿No es un lugar maravilloso para pasar unos días?