Entre rafia, esparto, bambú y otras fibras naturales pasaría todo el verano, bajo la sombra incesante de porches frondosos, incluso en una hamaca mullida y llena de naturalidad formada por pequeños troncos y ramas, cualquier elemento natural es válido para esta época el año. Aportan frescura y sensación de bienestar en cualquier ambiente, además encontramos una amplia gama de objetos elaborados con estas maravillosas fibras: taburetes, sillones, techos, sombreros, cestos, salvamanteles… me gusta especialmente por su esencia rústica y por ser objetos todavía realizados a mano mediante un trabajo minucioso y elaborado.
 

¿Cuál es vuestro objeto preferido este verano? A mi me gusta especialmente un cesto de rafia y asas de cuero que suelo llevar a la playa, además de ser muy práctico es comodísimo y al llegar a casa puedo dejarlo en cualquier rincón decorando.