Ahora me doy cuenta de que cambiar el pavimento de las casas no es tarea fácil. Hay que elegir entre muchísimos materiales, colores, texturas… y además hay que decantarse por poner el mismo suelo en toda la casa o mezclar e incorporar en los baños y la cocina otro diferente. Si hay un material que me haya sorprendido gratamente, esa es la baldosa hidráulica, me gusta el efecto provocado en los hogares, un suelo vivido, pisado y sentido que puede convertirse en el centro de todas las miradas y decorar por si solo. Cómo veis, una buena manera de utilizarlo es situarlo en la entrada de la casa, suavizando su efecto con maderas nobles, cerámica y fibras naturales.

¿Qué os parece este recibidor?  ¿Verdad que así  dan ganas de llegar a casa y dejar bajo el banco las botas de lluvia?
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